Las 3 claves de un emprendimiento digital exitoso.

Se conversan y escriben muchos consejos para que tu emprendimiento digital logre éxito en el mundo del desarrollo de software, dicen que debe tener un "diferenciador" sobre lo que hay disponible en el mercado hasta ahora, y en este punto salen a relucir áreas como big data, inteligencia artificial o machine learning que durante los últimos años han estado muy de moda, pero sin embargo, el 99% de las personas que trabajan en las áreas digitales poco saben de qué trata técnicamente cada una de ellas, ni menos han desarrollado algo incluyendo alguna de estas.

Muchos emprendedores, conscientes de este "problema", buscan y rebuscan utilizar algunas de estas áreas para que, al presentar su emprendimiento suene cool. Muchas veces dirán que su sistema utiliza "inteligencia artificial", pero en realidad el bot que han creado para contestar automáticamente a través de un chat se programa a través de reglas simples, donde si alguien escribe "hola, cómo está?" el chatbot podrá responder, pero si alguien escribe "buena wn, como tay" el chatbot no sabrá qué responder, ya que fue realizado por un sistema de reglas de preguntas y respuestas, y no por inteligencia artificial que aprende desde las cosas que las personas escriben. Por poner un ejemplo rápido que se me viene a la cabeza, ya que están tan de moda los chatbot.

A mi parecer hay tres grandes pilares, que todo emprendimiento de desarrollo de software -considerando que hacer y comercializar cerveza artesanal también es un emprendimiento- debe priorizar para tener éxito, sobre todo si son un SaaS.

Mis 3 consejos son: tener contactos para comercializar tu software, mantener un excelente servicio al cliente en post venta y, que la experiencia de usuario de tu software sea de alto nivel.

1. Red de Contactos: tener contactos para comercializar tu software: siempre será un problema si no tienes llegada con potenciales clientes o contactos. Asistir a eventos o ferias en un comienzo puede ser muy provechoso si vas a conversar con los asistentes, ya que lo más valioso, incluso un poco más que escuchar a los speakers, es la red de contactos de personas como tú que trabajan en la industria y que en algún momento podrían sugerir reuniones con potenciales clientes.

2. Post-Venta: mantener una excelente servicio de post venta: Asumiendo que tu software debe funcionar perfectamente y hacer lo que promete (vendiendo humo no llegarás muy lejos) debes dedicar recursos a atender las solicitudes de tus clientes, escuchar cuáles son sus problemas y necesidades. De esta forma tendrás la mejor retroalimentación para priorizar el roadmap de tu software. Además, respondiendo en el menor tiempo posible darás confianza a tu cliente de que puede contar contigo ante cualquier problema o necesidad.

3. UX: experiencia de uso: Muchas ideas se equivocan en este punto, al pensar que incluyendo algoritmos que sólo entendería un Doctor de la más prestigiosa Universidad del mundo tiene el futuro asegurado en ventas. Esto nunca será posible, si el software (o la funcionalidad) no se entiende o para lograr interpretar la información necesito al mismo Doctor de la prestigiosa Universidad. Para que esto logre buenos resultados se debe desarrollar una interfaz que cualquier usuario entienda y use sin inconvenientes, sin importar su grado académico o formación. La vieja escuela -llegando casi a la obsolescencia- debía implementar talleres exclusivos para explicar cómo funcionaban los software y, dónde y cómo podían acceder a la información ya que las interfaces contenían menúes ocultos, que nada ayudan al trabajo diario, hoy en día se debe humanizar la experiencia de cada usuario para realizar las tareas sin la necesidad de un manual.

Estos tres pilares, que son simples de aplicar dentro de todo emprendimiento deben ser prioritarios al momento de evaluar si tu proyecto tendrá éxito y quizás, no serás el próximo Facebook, Waze o Spotify, ni crecerás explosivamente en donde invertirán millones de dólares en tu empresa, pero es un piso mínimo si lo que buscas -en una primera etapa- es no morir.

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